Vitoria-Gasteiz, primera capital vasca en poner en marcha la nueva oficina judicial
Euskadi se sitúa a la cabeza del Estado en el despliegue de la Nueva Oficina Judicial, que supone un nuevo modelo organizativo que permite optimizar la organización, la gestión de las personas y los recursos puestos al servicio de una justicia, eficiente y eficaz, orientada a la ciudadanía
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- Comunicación Poder Judicial

El Tribunal Superior de Justicia del País Vasco y el Gobierno vasco han inaugurado la Nueva Oficina Judicial de Vitoria-Gasteiz. En el acto han participado el Portavoz del Gobierno vasco y Consejero de Administración Pública y Justicia, Josu Erkoreka, el Presidente del Tribunal Superior de Justicia del Gobierno vasco, Juan Luis Ibarra, el Secretario General de Justicia, Joaquín Silguero, y la Presidenta de la Audiencia Provincial de Araba, Mercedes Guerrero.
Además, han estado presentes el Fiscal-Jefe de la Audiencia Provincial de Álava, Jesús Izaguirre, la Secretaria de Gobierno del TSJPV, Begoña Basarrate, la Secretaria Coordinadora de Álava, Lourdes Ronda, el Juez Decano de Vitoria-Gasteiz, Jose Luis Nuñez, la Viceconsejera de Justicia, Ana Agirre, el Director de Administración de Justicia, Jon Uriarte, el Director de Justicia, Manuel Valín y la Directora de Gabinete de Departamento de Administración Pública y Justicia, Tatiana González San Sebastián.
NOJ
La Nueva Oficina Judicial es un nuevo modelo organizativo que responde al compromiso con la modernización de la Administración de Justicia, una modernización necesaria para avanzar hacia una gestión óptima de las personas y de los recursos que permita alcanzar el objetivo último de ofrecer a la ciudadanía una justicia eficiente y eficaz.
Esta transformación en el modelo de organización y funcionamiento de los juzgados va acompañada de la creación de un equipo de gestión del cambio, un equipo de implantación y una comisión de coordinación y mejora que serán los encargados de que las personas empleadas publicas tengan los recursos necesarios que les permitan comprender y asimilar de manera completa la nueva realidad y las tareas encomendadas.
El despliegue de la nueva estructura organizativa se sustenta en el uso de nuevas tecnologías de la información que facilitan la labor judicial, de esta forma, la herramienta de gestión procesal “Justizia.bat” se ha adaptado a las nuevas exigencias procesales y organizativas.
Despliegue de la NOJ en la CAE
Euskadi se sitúa a la cabeza del Estado en el despliegue de la Nueva Oficina Judicial y Vitoria-Gasteiz se convierte en la primera capital en la que se implanta la NOJ: en 2010 se puso en marcha la NOJ en Azpeitia, Amurrio, Eibar, Irún y Getxo. Un año más tarde, en 2011, se creó la de Balmaseda, Bergara, Durango, Gernika y Tolosa. A finales de este año 2014 se prevé la implantación de la NOJ en el partido judicial de Barakaldo y en 2015 está prevista su puesta en marcha en Donostia para culminar el proceso de implantación en Bilbao.
Estructura
La Nueva Oficina Judicial dota al personal de la administración de justicia de dos nuevas unidades básicas:
-Unidades Procesales de Apoyo Directo a los órganos judiciales (UPAD), que asisten directamente a la judicatura y magistratura en el ejercicio de sus funciones para el exacto y eficaz cumplimiento de las resoluciones que se dictan.
-Servicios Comunes Procesales (SCP), que pueden ser generales (asistencia a la sala, actos de comunicación y el archivo territorial de expedientes judiciales) o de ejecución (encargados de recibir y tramitar los expedientes judiciales para la ejecución de una resolución).
La NOJ está basada en los siguientes principios:
-Principio de jerarquía: Es la base de la nueva organización piramidal en la que se establecen las relaciones de subordinación y dependencia.
-Principio de división de funciones: El trabajo deja de distribuirse por número de expedientes entre las personas que forman la NOJ y se gestiona en función de trámites y fases del procedimiento. Así, se logra una mayor especialización de las personas integrantes del equipo. No obstante, se garantiza la flexibilidad necesaria para que la organización pueda adaptarse a las necesidades que genere el servicio.
-Principio de coordinación: Se trata de conseguir una buena comunicación entre las distintas unidades de tal forma que se eviten las duplicidades o las omisiones en el ejercicio de las funciones asignadas.