El presidente del Tribunal Superior de Madrid recibe a los 34 jueces en prácticas de la 74ª Promoción de la Escuela judicial
El presidente les ha felicitado por el éxito académico y les ha recordado la responsabilidad de la labor que pronto van a ejercer al servicio de la ley y del ciudadano
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- Comunicación Poder Judicial

El presidente del TSJ de Madrid, Celso Rodríguez Padrón, ha recibido este martes en la sede del tribunal a los 34 jueces (23 mujeres y 11 hombres) de la 74ª Promoción de la Escuela Judicial, que desde diciembre pasado realizan la fase de prácticas tuteladas para su plena integración en la carrera judicial en diferentes juzgados de la Comunidad de Madrid.
Como es tradicional, los nuevos togados, coordinados desde su salida de la Escuela por la magistrada Cristina Villa Cuesta, titular del Juzgado de Primera Instancia nº 58 de la capital, han tenido la oportunidad de conocer las instalaciones del TSJM y mantener un encuentro con su presidente, en el que les ha felicitado por el éxito académico y les ha recordado la responsabilidad de la labor que pronto van a ejercer al servicio de la ley y del ciudadano.
Rodríguez Padrón les ha recordado que ingresarán en breve en el ejercicio pleno de la función jurisdiccional en unas condiciones mejores que las que tradicionalmente ha habido, ya que hoy disponen de la más actualizada documentación judicial para el estudio de sus resoluciones, lo que antes no ocurría, si bien, se enfrentarán a un volumen de asuntos y a una complejidad en las materias a resolver que antes tampoco había.
El aterrizaje en los juzgados –les ha dicho- es hoy menos suave de lo que era antes, una circunstancia que se ve compensada con la convicción y la responsabilidad que “adquiristeis al elegir la mejor profesión del mundo, un trabajo que será de aquí en adelante para vosotros fuente de satisfacción vital”.
Además, los nuevos jueces, de los que 26 tendrán su destino de sustitución y/o refuerzo en la región madrileña, visitaron la maqueta de la futura Ciudad de la Justicia, que se encuentra instalada en el hall del edificio, un macro-complejo de más de 400.000 metros cuadrados, cuya finalización está prevista para dentro de unos pocos años y en la que, a buen seguro, muchos de ellos tendrán en sus instalaciones su puesto de trabajo.