La sección novena de la Audiencia Provincial de Málaga ha condenado a cinco años de prisión a un hombre por pegar a su hijo de 17 días, al que le provocó graves lesiones. La sentencia absuelve a la madre del bebé, también acusada de un delito de lesiones, al considerar que no quedó probado que la madre consintiera dichas lesiones ni supiera del peligro que podría correr su hijo. La Audiencia, además, impone al acusado la prohibición de acercarse al niño durante diez años y a que le indemnice con 90.000 euros.

La sentencia declara probado que la pareja vivía en Estepona junto con su hijo recién nacido. A los pocos días de nacer, como el bebé no cesaba en su llanto, el padre le zarandeó sin que le produjera lesiones. Pero ese mismo día, mientras que la madre se ausentó de la casa, el acusado lo golpeó contra una superficie dura no determinada, lo que provocó lesiones en diferentes partes del cuerpo, tanto externas como internas.

La Sala considera probado que fue el padre quien le produjo dichas lesiones, pese a que ninguno de los dos reconoció en el juicio haber golpeado al niño, aunque también declararon que no vieron al otro progenitor golpear al menor. En ese sentido, la sentencia señala que "si durante el tiempo que ambos acusados estuvieron juntos ninguno agredió al menor, la acción lesiva tuvo que producirse durante el tiempo que estuvo sólo con su padre".

La Audiencia destaca las graves lesiones producidas al menor, con un gran "número de huesos que el bebé tenía fracturados, siendo el riesgo producido también grave". Por ello, por la gravedad de las lesiones -"especialmente reprobables, penal y socialmente, pues el menor carecía de cualquier asistencia"- condena al acusado por un delito de lesiones con la agravante de parentesco y la de que la víctima es menor de 12 años.