En sesión solemne, los plenos de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, del Consejo de la Judicatura Federal y del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación entregaron el Premio Nacional al Mérito Judicial 2009, al ministro en retiro Arturo Serrano Robles y a la magistrada en retiro Guadalupe Cano de la Cruz, en los ámbitos federal y estatal respectivamente.

Al otorgar el reconocimiento, el ministro Guillermo I. Ortiz Mayagoitia, presidente de la SCJN y del CJF, afirmó que el Poder Judicial de la Federación reconoce el compromiso y la voluntad constante de los galardonados que han hecho de sus talentos y capacidad, virtud, y de su historia, ejemplo. También recordó que el 28 de noviembre del 2008, se convocó a los impartidores de justicia del país, a las autoridades legislativas y administrativas y a la comunidad jurídica, para que postularan candidatos a dicho premio y como respuesta se obtuvieron 22 propuestas. De éstas, 7 candidaturas correspondieron al ámbito federal y 15 al local.

A su turno, el ministro en retiro Arturo Serrano Robles dio las gracias por el premio. “Esta distinción me emociona indescriptiblemente; con toda sinceridad declaro que en el transcurso de mi, ya muy larga vida, no he hecho más que cumplir con los deberes que me imponía el cargo que la suerte me había encomendado. Y cumplir con tales deberes constituía una obligación, no un mérito que deba ser premiado. Doy las gracias profundamente emocionado, éste el día más feliz de mi vida”, expresó.

En tanto, la magistrada Guadalupe Cano de la Cruz, ex presidenta del Tribunal Superior de Justicia del Estado de Tabasco, subrayó que el premio representa un reconocimiento a todos los servidores judiciales de las entidades federativas. “Ellos son servidores anónimos que a largo y ancho de nuestro país, a diario, libran una encarnizada y constante lucha por el derecho”, enfatizó.

Finalmente, el ministro en retiro Juan Díaz Romero expresó que este premio reconoce la perseverante voluntad de entender la justicia como el baluarte más sensato de la sociedad humana.