Los 37 miembros de la 72 Promoción de la Escuela Judicial que, en régimen de prácticas jurisdiccionales, se incorporan este mes de julio a diferentes órganos judiciales de los 21 partidos de Madrid en calidad de jueces sustitutos o de refuerzo, han tomado posesión este viernes ante la Sala de Gobierno del Tribunal Superior de Justicia de Madrid en el solemne acto de jura o promesa celebrado, como es tradicional, en el salón de actos de la sede del tribunal, en la plaza de las Salesas. 

En su discurso de bienvenida a los nuevos jueces (24 mujeres y 13 varones), el presidente del TSJM, Celso Rodríguez Padrón, ha apelado al ‘orgullo y a la decidida vocación’ que se precisa en el ejercicio de la que ha catalogado como una ‘profesión fascinante y noble’ y que supone la ‘elevada tarea de juzgar a los semejantes’.

Rodríguez Padrón ha continuado su intervención con la exposición de lo que define como el ‘panorama crítico’ de la Justicia en España. Los rescoldos del impacto de la pandemia, las sucesivas huelgas sufridas en los últimos meses, que han contribuido de manera notable al crecimiento de la pendencia, así como el fin de la legislatura, que ha dejado en suspenso la tramitación de algunas reformas legislativas que podrían aliviar la presión en los órganos judiciales, son circunstancias negativas que ‘junto con los problemas estructurales que se arrastran desde hace ya demasiado tiempo’ –ha recordado- sitúan a la judicatura en la delicada situación en la que se encuentra.  ‘Pese a todo –ha enfatizado- el sistema resiste solamente gracias a la labor de la judicatura, que con esfuerzo y dedicación trabaja día a día’ y, únicamente debido a su profesionalidad, el ciudadano tiene garantías de que, ‘al margen del problema de la lentitud’, se cumple el mandato constitucional de la tutela judicial efectiva, consagrado en el artículo 24 de la Carta Magna.

Dos conceptos, esfuerzo y dedicación, que ha querido apuntalar con una cita de la escritora santanderina Concha Espina: ‘El sacrificio es obra de alto linaje que recibe ocultas recompensas’. Al hilo de la cual ha reclamado ‘respeto’  a toda la judicatura por parte del resto de instituciones del estado.

Para concluir, y tras felicitar a los nuevos jueces y, por extensión, a sus familiares, ha terminado en clave positiva y les ha animado a iniciar con fortaleza y decisión una etapa que ‘sin duda marcará’ sus vidas.

El evento ha contado con la presencia, además de los recién nombrados jueces y juezas, sus padrinos y madrinas, y con miembros de la Sala de Gobierno del Tribunal Superior de Justicia de Madrid, con sus familiares, amigos y allegados.