Premio AMMI 2016 para los mediadores de la Unidad Intrajudicial de Murcia

Reconoce en la categoría de mejor “proyecto nacional” el trabajo de más de 100 mediadores de la UMIM “por su labor profesional al frente de la unidad, realizada de forma altruista

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Comunicación Poder Judicial
Mediadores con el vocal del CGPJ, Juan Martínez Moya, tras recibir el premio calidad de la Justicia 2015
Mediadores con el vocal del CGPJ, Juan Martínez Moya, tras recibir el premio calidad de la Justicia 2015

La Asociación Madrileña de Mediadores ha otorgado el Premio AMMI al Mejor Proyecto Nacional al equipo de mediadores profesionales de la Unidad de Mediación Intrajudicial de Murcia (UMIM), “por su gran labor profesional al frente de la unidad, realizada de forma altruista”.

Con estos premios, que cumplen su sexta edición, la asociación quiere reconocer las mejores prácticas del territorio nacional, premiando la labor de personas físicas como organismos públicos y privados desarrolladas en el campo de la Mediación.

Esta unidad se puso en marcha en noviembre de 2013 como proyecto piloto del Tribunal Superior de Justicia de Murcia en las áreas de familia y penal sólo con 24 mediadores. Actualmente, y después de que se incorporara en 2015 a la Oficina Judicial, la bolsa de mediadores está compuesta por 107 personas, 66 mujeres y 41 hombres, divididos en cinco áreas: familia (45), penal (28), civil (18), menores (12) y contencioso (12) y con formación profesional en ramas muy variadas como derecho, economía o banca, trabajo social, psicología, fuerzas y cuerpos de seguridad o ingeniería. Cuenta también con tres funcionarios del Cuerpo de Tramitación que ofrecen el apoyo y la gestión administrativa al servicio. Todos ellos dirigidos por una letrada de la Administración de Justicia.

El equipo de mediación, en su agradecimiento, destacó el impulso que supone este reconocimiento a un proyecto “que busca un cambio de enfoque en la gestión del conflicto, que mantenga el buen hacer de tantos siglos de justicia, pero que a su vez incorpore las necesidades que la sociedad demanda actualmente, devolviendo a los ciudadanos la capacidad de ser responsables en la solución de sus conflictos”. Concluyendo que su objetivo es “ayudar a encontrar soluciones duraderas” y ofrecer respuestas “no cubiertas por el sistema de justicia”.