Resumen: La sentencia ha aprobado las medidas pactadas por los litigantes, incluida un custodia compartida y se ha procedido a ordenar de forma amplia el sistema por el que se han de atender los gastos alimenticios de los hijos. La apelación en este caso no es viable por un elemental principio de seguridad jurídica. La retractación que la parte recurrente manifiesta implica una valoración negativa, "a posteriori", del acuerdo alcanzado, pero esta circunstancia no está prevista legalmente como motivo de apelación. Que el cambio de percepción en el recurrente de que la distribución de la responsabilidad de los gastos pueda resultarle perjudicial, carece de relevancia jurídica. El recurso no debió ser admitido a trámite. A título de " obiter dicta" se ha de rechazar que se haya vulnerado el principio de proporcionalidad. Lo anterior no es obstáculo para promover una mediación o una modificación, si de dan nuevas circunstancias. Ni siquiera cabe la petición de que se aclare qué son gastos ordinarios o extraordinarios, por cuanto la representación letrada del recurrente conoce perfectamente la doctrina legal al respecto. La causa de inadmisión del recurso que concurre en este caso deviene en causa de desestimación.