Resumen: El Tribunal Superior de Justicia estima en parte el recurso del trabajador demandante contra la sentencia que declara procedente el despido disciplinario del mismo y considera que, no siendo nulo el mismo, si que es improcedente, puesto que el trabajador tenía derecho a trabajar con las debidas medidas de seguridad y habiendo pedido que se le proporcionasen mascarillas en su puesto de trabajo productivo, no se le entregaron porque en esa fechas -mediados de marzo de 2020- no había existencias de las mismas en ventas y por ello, despedirle, como sanción por negarse a trabajar al día siguiente de advertir que así lo haría si no se le proporcionaban tales medios de protección, es medida desproporcionada. Consta en la sentencia recurrida que el trabajador padece asma infantil e hiperreactividad bronquial, que trabaja en una máquina, junto con otro operario, con el que normalmente mantiene dos metros de distancia, pero hay momentos puntuales en que están uno al lado del otro por razones de atascos de la máquina y similares y que días antes un compañero de trabajo le dió el relevo y seguidamente pasó a cuarentena al haber quedado infectado un familiar, lo que conoció el demandante, quien, como también sufre alergia a ácaros, solía utilizar en otras ocasiones una mascarilla de su propiedad en el trabajo.