Eduardo Baena Ruiz y Jacobo López Barja de Quiroga han tomado hoy posesión como magistrados de la Sala Primera (Civil) y Sala Quinta (Militar) del Tribunal Supremo, respectivamente, en un acto presidido por el presidente del Tribunal Supremo, Carlos Lesmes.

Eduardo  Baena Ruiz ocupará la plaza dejada vacante por el nombramiento como presidente de esa misma Sala de Francisco Marín Castán. Nació en noviembre de 1948 e ingresó en la carrera judicial en marzo de 1976. Con una antigüedad de 37 años, 32 de ellos como magistrado, ha desarrollado casi toda su actividad en la jurisdicción civil y es autor de numerosas resoluciones en las que se abordaron cuestiones procesales y sustantivas novedosas en su tiempo.

Así, en 1985 dictó una sentencia relativa a la naturaleza temporal y no vitalicia de la pensión por desequilibrio (pensión compensatoria) en determinadas circunstancias y en 1990 otra en la que analizaba las nuevas formas de familia en relación a lo que debe entenderse por unión de hecho con virtualidad para producir determinados efectos jurídicos. En enero del año 2000 fue nombrado presidente de la Audiencia Provincial de Córdoba, cargo que ocupa en la actualidad tras haber sido reelegido en 2005 y en 2010.

Por su parte, López Barja de Quiroga ocupará la plaza vacante por la jubilación de José Luis Calvo Cabello. El nuevo magistrado del Tribunal Supremo nació en noviembre de 1955 e ingresó en la carrera judicial en enero de 1981. En 1989 obtuvo plaza en la Audiencia Provincial de Madrid. Ese mismo año, y por concurso de traslado, fue destinado al Gabinete Técnico del Tribunal Supremo, siendo adscrito a la Sala Segunda (Penal).

Fue vocal del Consejo General del Poder Judicial en el cuarto mandato de la institución entre los años 1996 y 2001. Se reincorporó tras el cese de su mandato al citado Gabinete Técnico del Tribunal Supremo.

Desde febrero de 2012 ocupó el cargo de magistrado jefe del Gabinete Técnico del Tribunal Supremo compatibilizándolo con el de director del Gabinete de la Presidencia del CGPJ.